Cuando hablamos de colocación de cerámica, imaginamos una cerámica perfectamente colocada, con materiales y acabados de primera calidad. Pero la realidad es que la mayoría de personas no le dan mucha importancia a un paso esencial antes de la colocación: el replanteo de la obra.
El replanteo es una de las responsabilidades del albañil, yendo desde el replanteo general del terreno y extendiéndose hasta el de todos los elementos de la edificación. Si se hace cuidadosamente, evitará errores en la ejecución de las siguientes fases.
Replanteo: qué es y qué implica
El replanteo consiste simplemente en trazar sobre el terreno todos los elementos de la obra que se describen en el proyecto o en los planos.
Tener una cerámica con un replanteo mal hecho dará como resultado piezas muy pequeñas en el perímetro de la estancia, más mermas de lo recomendable… En definitiva, obtendremos pocos “pros” y muchos “peros”.
Uno de los aspectos más importantes a tener en cuenta es disponer de las herramientas y utensilios que se requieran, así como examinarlos antes de empezar.
Cómo hacer el replanteo de la obra paso a paso
1. Por dónde empezar
A la hora de estudiar el replanteo que tenemos que hacer, podemos optar por empezar por distintos puntos de referencia. Una de las opciones más habituales es empezar por la puerta de entrada a la estancia (ya sea el baño, la cocina, etc).
Otra elección muy común en caso de realizar una colocación más grande, es repartir desde el centro de la estancia, realizando una línea horizontal y otra en el otro sentido. De esta forma podemos calcular las piezas que nos quedan en los extremos.
2. Las piezas
Las piezas no pueden ser nunca de una medida inferior al 50% del total de la baldosa. Si en el replanteo que estamos haciendo nos queda una distancia de 25 cm y estamos colocando un formato estándar de 60 x 60 cm, no será correcto.
Deberemos desplazar las piezas hacia un lado o hacia el otro hasta conseguir que esta pieza haga como mínimo 30 cm.
Posteriormente, lo haremos del mismo modo en la otra línea que hemos trazado durante el replanteo. De este modo, conseguiremos tener las mínimas mermas de material posible y esto repercutirá, sin lugar a dudas, en el precio del material y de la mano de obra.
3. Las juntas
A la hora del replanteo es muy importante contar con las juntas de separación entre piezas. Si son piezas pequeñas, estas juntas cobran más relevancia puesto que hay más que en formatos más grandes.
Deberemos sumar el tamaño de la junta a la medida de la cerámica. Por ejemplo: 20 cm + 1,5 cm = 21,5 cm por pieza, o, si nos decantamos por un formato mayor, 60 cm + 2 cm = 62 cm por pieza.
Si no se tiene esto en cuenta, notaremos que la pieza final es menor de lo que teníamos planeado en el replanteo porque se le habrán sumado todas las juntas de esa línea.
4. Colocar las piezas
Independientemente del tipo de replanteo que se elija, siempre hay que elegir uno antes de empezar y ajustarse a ello, sin cambiar a medio proceso.
Es importante empezar a colocar la primera pieza entera de la que disponemos, y realizar una cruz con las piezas, de esta forma se obtendrá una guía para seguir.
Una vez las piezas colocadas y el material de agarre fraguado, podemos pasar a colocar la cerámica de los paramentos verticales. Finalmente, colocaremos el perímetro de la estancia, tanto en pavimento como en pared.
5. Paramentos verticales
Para los paramentos verticales, se debe realizar también un replanteo previo, tomando en consideración las ventanas, puertas, columnas, etc.
En este caso, si el formato es el mismo que en el pavimento, también debemos tener en cuenta las juntas del pavimento, aunque no es muy habitual que esto suceda.
Por otro lado, debemos tomar en consideración la altura de la pared a revestir, puesto que se empieza a colocar desde el suelo hacia arriba dejando la primera fila sin colocar.
Para esto, utilizaremos los soportes de regles para aguantar los regles donde van a ir apoyadas las piezas cerámicas de la primera fila.
Por norma general, la pieza inferior debe ser de una medida no inferior al 50 % de la pieza, pero aquí entran en juego factores como la altura y el formato de la pieza.
Puede que nos interese colocar una pieza grande arriba del todo o puede que no, de ahí la importancia del replanteo.
6. Cerámica de gran formato
Cuando hablamos de lámina cerámica de gran formato, piezas que pueden medir 3x1m, el replanteo cobra mucha más relevancia. No podemos colocar piezas de 1 m y dejar uno de los lados con una pieza de 5cm, pues no sería lógico.
Por esto, cuando hablamos del replanteo en grandes formatos, tenemos que tomarnos más tiempo para saber qué queremos hacer. Las mermas en estos materiales son muy caras y no queremos desperdiciar material.
En estos formatos podemos llegar a contar con la ayuda de una dirección facultativa. Esta dirección nos va a indicar cómo debe de colocarse el material.
Ahora ya conoces cómo se hace el replanteo de una obra y los factores que hay que tener en cuenta. Gracias a este proceso, puedes ver cómo cortar las baldosas cerámicas para colocarlas correctamente.
A medida que tengas más experiencia todo será más rápido, pero el replanteo siempre será la parte inicial y más importante de una colocación cerámica sea cual sea su formato.
Publica un comentario