Seguramente si has llegado hasta este blog te estarás preguntando cómo se hace para rejuntar azulejos correctamente, una vez que ya sabemos cómo colocar azulejos. Es una pregunta que muchas personas se hacen, especialmente porque el rejuntado es un trabajo que solo tiene una oportunidad de hacerse bien. Por eso, en este artículo aprenderás todo lo necesario para ser un experto en rejuntar azulejos y baldosas.
Una vez que las baldosas estén instaladas en una cuadrícula perfecta, es hora de terminar el trabajo con la aplicación de lechada. Si bien ciertamente no es el material más lujoso que se usará en una renovación, la lechada juega un papel importante en el aspecto final. Con una variedad de colores para elegir, la lechada se puede usar para agregar contraste o crear un espacio elegante.
Quizás no sea el trabajo más emocionante dentro del bricolaje, pero las baldosas con lechada deficiente no solo se ven mal, también son menos estables y es más probable que se astillen o necesiten reparaciones. Entonces, para asegurarnos de hacer bien el trabajo la primera vez en RUBI hemos creado una guía completa paso a paso sobre cómo rejuntar los azulejos.
Sigue estos pasos y estarás listo para rejuntar adzulejos como un profesional.
Cómo renovar las juntas de los azulejos? Paso a paso
1. Elija la lechada
La pasta de juntas o lechada es un material utilizado para rellenar los huecos entre las baldosas. La lechada une los azulejos y baldosas, los protege de la humedad y le da a la zona de alicatado un acabado atractivo. La selección del tipo correcto de lechada para el trabajo facilitará la aplicación y mejorará la apariencia y longevidad de su área de azulejos y baldosas.
Hay tres tipos principales de lechada: lechada a base de cemento (con o sin látex), epoxi y lechada de uretano. Todos funcionan y todos tienen sus ventajas y desventajas.
Lechada a base de cemento
La variedad más común utilizada en proyectos es una lechada a base de cemento porque son los más fáciles de usar. Si tiene juntas pequeñas entre las baldosas, utilizará una lechada sin arena, mientras que las juntas más gordas requieren lechada con arena.
Lechada epoxi
Las lechadas epóxicas son caras y, por lo general, son mezclas de dos partes con sólidos y aditivos de color. La lechada epoxi es más impermeable que otros tipos de lechada y no sufre encogimiento, lo que la hace adecuada para su uso tanto en pavimentos como en revestimientos. Se utilizan principalmente para proyectos comerciales y son mucho más difíciles de instalar que las lechadas a base de cemento y, por lo tanto, requieren más mano de obra.
También pueden dejar restos difíciles de eliminar, no recomendamos este tipo de junta para las personas que quieren rejuntar azulejos por primera vez. (Además, algunas personas pueden ser alérgicas a las resinas epoxi).
Lechada de uretano
Las lechadas de uretano también son caras y se premezclan en baldes. La lechada de uretano necesita siete días para curar antes de exponerse al agua, así que hay que tenerlo en cuenta si estás pensando en usarla en una única ducha.
2. Prepara las herramientas y tenlas listas para empezar a rejuntar azulejos
Debes tener estas herramientas básicas a mano antes de comenzar a aplicar la lechada:
- Cubos
- Agua
- Rubimix o mezclador
- Lechada de cemento en polvo
- Paleta
- Llanas de goma para juntas
- Espátula para aplicar
- Esponjas
- Guantes
3. Mezcla la lechada
Cuando se trata de mezclar la lechada, no querrás improvisar. Lee las instrucciones del fabricante en la bolsa o en la caja de la lechada y sígalas al pie de la letra. Hagas lo que hagas, no agregues demasiada agua. Cuanta menos agua uses, mejor será la consistencia y la fuerza de la lechada. Además de utilizar la menor cantidad de agua posible, también conviene mezclar la mayor cantidad posible.
Un buen mezclado ayudará a asegurar que el color se mantenga fiel a lo largo de todo el rejuntado, por este motivo nosotros recomendamos usar el Rubimix, que te dejará un mezclado perfecto.
4. Práctica antes de empezar a rejuntar
Antes de comenzar a rejuntar los azulejos, ¡practica! Utiliza un área pequeña y no muy a la vista para practicar y ver como quedaría, o mejor aún, haz una maqueta usando una tabla con 4 azulejos, para luego enlechar y poder ver cómo sería el resultado final.
5. Aplica lechada en pequeñas áreas
Aplica poco a poco la lechada en los nuevos azulejos y comienza a trabajar. Con una llana de goma para juntas aplica la lechada en las juntas en un ángulo de 45 grados. Aplicar la lechada en un ángulo de 45 grados es muy importante, con esto nos referimos al ángulo en el que sostiene la llana de goma, de esta forma introduciremos mejor la lechada dentro del espacio para las juntas.
Haz arcos amplios y aplica la lechada por completo en todas las juntas entre las baldosas. También puedes usar la llana de goma para ir limpiar el exceso de lechada a medida que vas avanzando.
Recuerda que es muy importante trabajar en secciones, en lugar de tratar de enlechar toda la pared o el piso de baldosas a la vez.
6. Limpiar las baldosas a fondo
Una vez que la lechada se asienta durante unos minutos (consulte el paquete para conocer el tiempo recomendado), limpia las superficies de las baldosas con una esponja para lechada.
Deberás limpiar y frotar cualquier sobrante de lechada con una esponja o toalla una vez que la lechada se endurezca. En este paso debes tener cuidado de no lavar las juntas de lechada con demasiada agua; asegúrate de que la lechada se haya asentado un poco antes de comenzar a limpiar las baldosas y limpia las esponjas y cubos de agua con frecuencia, ya que el agua sucia no limpia.
Bueno, esperamos que te haya gustado este blog, y ya verás que siguiendo estos pasos “rejuntar azulejos” es muy sencillo. ¡Esperamos tus fotos con el resultado final!
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