Crear un presupuesto para un revestimiento cerámico antes de pasar a la etapa de colocación de la cerámica depende de muchas variables que debemos tener en cuenta. A continuación, os contamos qué debéis tener en cuenta para calcular el precio de alicatar una cocina.
Alicatar una cocina depende del precio de varios factores, que van desde los materiales utilizados hasta la mano de obra de quien va a realizar el trabajo. Si vamos a realizarlo nosotros mismos, nos ahorraremos la mano de obra, pero deberemos contar con la cantidad de horas que invertiremos en el proyecto.
Factores que influyen en el precio de alicatar una cocina
Superficie de la cocina
Lo primero que debemos determinar para poder calcular el precio de alicatar una cocina es el estado de la superficie que vamos a alicatar. ¿Se trata de una cocina nueva, con paredes de hormigón o, por el contrario, nos hallamos ante una renovación en la que hay que eliminar el alicatado antiguo?
Estado de la cocina
Si la estructura es nueva y está bien acabada, apenas deberemos realizar ninguna acción previa sobre ella. Quizá habrá que aplicar una capa sellante para el hormigón si vamos a alicatar con baldosa porcelánica, y, por tanto, vamos a usar un adhesivo modificado C2, o saturar la superficie de agua si vamos a usar baldosa cerámica tradicional con adhesivo C1.
Si, por el contrario, hay que eliminar el revestimiento existente, deberemos contar con el tiempo que nos llevará extraer las baldosas antiguas y llevar los escombros a un contenedor al efecto. Generalmente ese alicatado se despegará de la pared llevando consigo el adhesivo original y parte del cemento u hormigón que había debajo, con lo que nos encontraremos, finalmente, con una pared llena de irregularidades.
Con toda probabilidad deberemos añadir al presupuesto tanto el tiempo que nos cueste reparar la pared para nivelarla, como el mortero de recrecido que utilicemos (un saco de 25Kg suele costar alrededor de 10€).
Replanteo
Una vez tengamos la superficie preparada, vendrá una parte en la que el único material que utilizaremos será nuestra materia gris: el replanteo. Si le dedicamos todo el tiempo necesario, nos ahorrará tiempo durante el alicatado de la cocina, problemas de difícil solución y malos acabados.
Se trata, básicamente, de analizar la superficie a alicatar, de forma que nos planteemos, teniendo en cuenta todos los elementos (puertas, ventanas, entradas y salidas de agua, etc.) cómo debemos colocar nuestras baldosas. Como es casi imposible que la medida de las baldosas y el alto y ancho a alicatar coincidan, tendremos que decidir dónde irán los cortes de las baldosas. Intentaremos evitar las tiras finas, los cortes difíciles en L en las ventanas y puertas, y poner las baldosas cortadas donde sean menos visibles.
Si conseguimos tener todo esto en cuenta, obtendremos un resultado excelente y haremos un uso óptimo del tiempo.
Adhesivos y cerámica
Para el alicatado de esta cocina, deberemos tener en cuenta el precio del adhesivo que usemos y la cerámica que vamos a colocar. La elección del formato y material condicionará el tipo de adhesivo que usaremos.
Si usamos cerámica tradicional, podemos usar mortero convencional, que suele llevar la cualificación C1 (mortero sin modificar). Si usamos porcelánico, dado que es un material que absorbe muy poca agua, y que, por tanto, no admite la adherencia mecánica, deberemos usar un adhesivo cualificado C2 (mortero modificado) para conseguir una adherencia química. Dentro de estos adhesivos podemos encontrar productos con características interesantes para el alicatado. Existen, por ejemplo, adhesivos con un tiempo abierto más largo (lo que nos resultará muy útil si trabajamos con formatos muy grandes), o adhesivos con resistencia a la tracción (cosa que nos puede ayudar en el trabajo en vertical).
Formato porcelánico
En relación al formato y su precio, existen hoy en día opciones de buena calidad de muchos formatos porcelánicos. Lo que cueste la cerámica dependerá de lo que quieras pagar, pero existen buenas opciones de porcelánicos por 10-15€ por m2.
Si elegimos un formato mayor de 30×30 o si no somos colocadores expertos, nos ayudará mucho en la colocación el uso de un sistema de nivelación, que evitará los antiestéticos desniveles entre baldosas. Puedes usar un sistema de brida y campana (Como el Tile Level) o uno de brida y cuña (como el Delta), el que te resulte más cómodo de usar.
Juntas empleadas
Una vez colocada la cerámica, solo faltará tener en cuenta una cosa más: las juntas. Podremos escoger entre dos tipos de materiales para la junta: mortero cementoso (el de toda la vida) o mortero epoxi, que tiene una técnica de colocación diferente y es mucho más resistente a la suciedad y al deterioro del color.
Son muchas variables las que entran en juego para calcular el precio de alicatar una cocina, pero el tenerlas todas en cuenta hará que el cálculo del precio sea óptimo.
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